Todos ustedes son terroristas potenciales. No importa que vivan en Gran Bretaña, Estados Unidos, Australia u Oriente Medio. La ciudadanía ha sido abolida de hecho. Cuando usted enciende el ordenador, el Centro Nacional de Operaciones del Departamento de Seguridad de la Patria de Estados Unidos puede controlar si teclea no solo “al Qaeda” sino también “maniobras”, “instrucción”, “oleada” y “organización”, todas ellas palabras proscritas. El anuncio del gobierno británico de que pretende espiar cada correo electrónico y llamada de teléfono no es ninguna novedad. La aspiradora satélite conocida con el nombre de Echelon lo ha estado haciendo durante años. Lo que ha cambiado es que Estados Unidos ha emprendido un estado de guerra permanente y que un estado policial está consumiendo la democracia occidental.