El Departamento de Estado de Estados Unidos anunció en un comunicado que “Estados Unidos no forma parte de la Convención de 1954 de la (Organización de Estados Americanos) OEA sobre el Asilo Diplomático y no reconoce este caso como una cuestión de derecho internacional”.
El Gobierno estadounidense aseguró que el caso Assange debe ser tratado como un asunto bilateral entre Ecuador y el Reino Unido, y la OEA, a la que recurrió Quito para abordar el caso, no juega ningún papel en esta cuestión.
EE.UU. previamente afirmó que no quiere “perseguir” al australiano refugiado en la Embajada ecuatoriana en Londres, capital del Reino Unido, y rechazó las afirmaciones de Quito de que el activista necesita ser protegido de las medidas vengativas de Estados Unidos.
El Gobierno de Ecuador decidió el jueves otorgar asilo político a Assange, que se refugió el pasado 19 de junio en la embajada de ese país en Londres y solicitó asilo político para evitar su extradición a Suecia, donde se le acusa de supuestos delitos sexuales. Esta decisión se produjo después de que Londres amenazara a Ecuador con una intervención en su embajada en territorio británico para arrestar al fundador de WikiLeaks.
La Organización de Estados Americanos (OEA), que celebra desde el jueves una reunión de urgencia a petición de Ecuador para tratar la amenaza del Reino Unido a su país, aprobó el viernes convocar una reunión de cancilleres para el próximo 24 de agosto que tiene como objetivo analizar la amenaza británica de irrumpir en la Embajada ecuatoriana en Londres.
Assange, el creador de la polémica página Web que reveló miles de cables secretos estadounidenses, niega las acusaciones presentadas en su contra alegando que las mismas tienen fundamentos políticos.