La organización neofascista UnoAmérica del venezolano Alejandro Peña Esclusa, detenido en Caracas por terrorismo, acaba de concluir en Bogota la reunión anual de sus dirigentes, apenas unos días después de terminarse el encuentro de la extrema derecha continental en el Capitolio de Washington. La actividad estratégica de esa agrupación de organizaciones constituidas por nostálgicos de las dictaduras militares y partidarios de regímenes que se entregaron a Estados Unidos, se consagró a “un exhaustivo diagnóstico de la situación continental” según un breve comunicado emitido por los organizadores del “evento”.
El encuentro cuyo sitio se mantuvo secreto, se inició con la lectura de una carta de Peña Esclusa en la cual el “líder” neofascista expresa sus orientaciones.
En su misiva, el detenido “sugiere respetuosamente” al presidente colombiano Santos “que reconsidere la forma como se relaciona con el señor Hugo Chávez” y felicita al presidente salvadoreño Mauricio Funes, “quien habiendo sido elegido Presidente gracias al Frente Farabundo Martí -partido fundador del Foro de Sao Paulo-, decidió distanciarse de la línea” del presidente venezolano.
En un análisis de la coyuntura continental, UnoAmèrica valora que “actualmente, hay catorce países latinoamericanos, cuyos gobiernos pertenecen o están vinculados al Foro de Sao Paulo”, fuente de todos los males según el grupo.
UnoAmérica acaba de recibir un saludo “solidario” del terrorista cubanoamericano Armando Valladares quién asegura que “Peña Esclusa es un "titán" de la democracia, "un hombre que ha luchado por la libertad en todo el continente" y que “Chávez lo tiene preso” porque "le tiene miedo".
Por otra parte, m iembros de la Iglesia Católica en Bolivia acaban de denunciar la colusión entre miembros de la jerarquía de la Conferencia Episcopal Latinoamericana (Celam) con la ultraderecha después de una denuncia de la Agencia de Noticias Fides (ANF) -dirigida por el jesuita José Gramunt- según la cual el presidente de la Celam, Raymundo Damasceno, “recibió y bendijo” a dirigentes de UnoAmérica en el curso de una audiencia otorgada en Brasil.
Peña Esclusa ha sido detenido el pasado 12 de julio, por miembros del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), que hallaron en su residencia de Caracas 900 ramos de explosivo militar C-4 junto con 100 cápsulas de detonadores de calor y dos de tipo eléctrico.
Se trata de una cantidad de explosivos correspondiente a cuatro veces lo que se utilizó para volar la camioneta en la que perdió la vida el Fiscal Danilo Anderson, asesinado el 18 de noviembre de 2004.
El encuentro cuyo sitio se mantuvo secreto, se inició con la lectura de una carta de Peña Esclusa en la cual el “líder” neofascista expresa sus orientaciones.
En su misiva, el detenido “sugiere respetuosamente” al presidente colombiano Santos “que reconsidere la forma como se relaciona con el señor Hugo Chávez” y felicita al presidente salvadoreño Mauricio Funes, “quien habiendo sido elegido Presidente gracias al Frente Farabundo Martí -partido fundador del Foro de Sao Paulo-, decidió distanciarse de la línea” del presidente venezolano.
En un análisis de la coyuntura continental, UnoAmèrica valora que “actualmente, hay catorce países latinoamericanos, cuyos gobiernos pertenecen o están vinculados al Foro de Sao Paulo”, fuente de todos los males según el grupo.
UnoAmérica acaba de recibir un saludo “solidario” del terrorista cubanoamericano Armando Valladares quién asegura que “Peña Esclusa es un "titán" de la democracia, "un hombre que ha luchado por la libertad en todo el continente" y que “Chávez lo tiene preso” porque "le tiene miedo".
Por otra parte, m iembros de la Iglesia Católica en Bolivia acaban de denunciar la colusión entre miembros de la jerarquía de la Conferencia Episcopal Latinoamericana (Celam) con la ultraderecha después de una denuncia de la Agencia de Noticias Fides (ANF) -dirigida por el jesuita José Gramunt- según la cual el presidente de la Celam, Raymundo Damasceno, “recibió y bendijo” a dirigentes de UnoAmérica en el curso de una audiencia otorgada en Brasil.
Peña Esclusa ha sido detenido el pasado 12 de julio, por miembros del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), que hallaron en su residencia de Caracas 900 ramos de explosivo militar C-4 junto con 100 cápsulas de detonadores de calor y dos de tipo eléctrico.
Se trata de una cantidad de explosivos correspondiente a cuatro veces lo que se utilizó para volar la camioneta en la que perdió la vida el Fiscal Danilo Anderson, asesinado el 18 de noviembre de 2004.
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