En medio de las protestas sociales contra las actividades mineras de las compañías internacionales que operan en el país, estas tenían, el 2005, un aliado influyente en el entonces presidente del Consejo de Ministros, Pedro Pablo Kuczynski, según reveló un texto filtrado por Wikileaks y publicado ayer en el diario británico The Guardian.
Confrontado con la revelación, Kuczynski eludió responder y en escuetas declaraciones dijo que no sabe nada del asunto y que la embajada de EEUU –país al que debe servir según juró al optar la nacionalidad norteamericana- puede decir lo que quiera.
El documento firmado por el entonces embajador de la Casa Blanca en Lima, James Curtis Struble, señala que el actual candidato presidencial de Alianza por el Gran Cambio, tenía la disposición de abordar la situación de las actividades de las grandes empresas extranjeras dedicadas a la minería.
“Con el nombramiento del nuevo primer ministro Pedro Pablo Kuczynski, tenemos un aliado del gobierno (de Alejandro Toledo), influyente, en una posición que está dispuesto a abordar la cuestión de los actos de ilegalidad en las comunidades mineras”, reza el cable.
Este documento –que data del 19 de agosto del 2005- fue dado a conocer por The Guardian junto a una decena de cables relacionados con la actividad de las grandes compañías mineras en el Perú. De él se desprenden los comentarios de Kuczynski a favor de garantizar las actividades en el país de estas empresas, como su rechazo a la propuesta nacionalista de aplicar un impuesto a las sobreganancias mineras.
“Sus recientes declaraciones acerca de poner la casa en orden, establecer el control de los caminos donde transita el comercio, son alentadores”, señala el mencionado cable de la embajada de Estados Unidos.
Los otros cablesAdemás del documento que revela la incondicionalidad de Kuczynski en favor de las mineras, la embajada norteamericana da cuenta de reuniones con su similar de Canadá, así como los representantes de varias de las empresas transnacionales mineras con actividades en el Perú, tales como Antamina, Newmont (Minera Yanacocha), Minera Quellaveco, Barrick, BHP Billiton (mina Tintaya).
Una de las citas -luego de los hechos de violencia entre fuerzas del orden y comuneros de Huancabamba y Ayabaca (en la sierra de Piura) en contra de la presencia de la firma británica Majaz en tierras comunales-, sirvió para revisar las dificultades de funcionamiento, así como para coordinar cómo mejorar el cLima de inversión.
Con el propósito de contrarrestar la presencia de fuerzas políticas como el Partido Comunista del Perú-Patria Roja, traficantes de Drogas y de comités rurales de defensa (ronderos), Struble pidió a las empresas que elaboren una lista completa de los proyectos de su comunidad (carreteras, escuelas, clínicas, pozos) y de esa manera dar a conocer mejor el impacto positivo de los proyectos mineros en el Perú.
El diplomático recomendó que las embajadas como grupo (EE.UU., Canadá, Reino Unido, Australia, Suiza y Sudáfrica) destaquen los miles de millones de dólares invertidos por las mineras en el país.
El papel de las ONGSegún dan cuenta los cables, los ejecutivos de las transnacionales expresaron preocupación de que ninguno de los líderes de los partidos que participaron en las elecciones presidenciales del 2006 se hubiera pronunciado en contra de la violencia antiminera.
En otros cables, la embajada estadounidense informa cómo las organizaciones no gubernamentales (ONG) realizan campañas contra las actividades de las multinacionales, sobre todo, desde el estallido de la violencia contra la anglo-australiana BHP-Tintaya.
La Minera Quellaveco –según los documentos--, acusó a Oxfam América y Amigos de la Tierra, de fomentar actitudes antiminería, explotando los bajos niveles de la Educación de la población y la debilidad de las instituciones en las zonas rurales del Perú.
No hay comentarios:
Publicar un comentario