Esa fue una de las principales conclusiones del Foro en procura de la anulación de dichos dispositivos, organizado por la central laboral, que también demandó a los candidatos presidenciales pronunciarse por la derogación de los decretos o declarar su nulidad de ser elegidos si el gobierno actual no los elimina.
Las organizaciones laborales coincidieron en señalar también que los decretos de urgencia 001 y 002 no tienen como objetivo el desarrollo de la infraestructura nacional, sino que buscan hacer negociados y subastar la soberanía y los bienes nacionales.
saludaron la decisión de las empresas estatales de realizar un paro el 23 de marzo como parte de las medidas de fuerza desarrolladas para anular los dispositivos.
Tras ratificar la unidad por la soberanía del Perú, contra la corrupta subasta, la CGTP llamó a los ciudadanos conscientes a sumarse a la lucha. La central sindical reiteró además su respaldo a los trabajadores azucareros en su demanda de promulgación de la Ley de Protección Patrimonial de sus empresas, que el presidente García ha vetado.
El representante del Foro Soberanía Energética y candidato de Gana Perú al Parlamento, Manuel Dammert, ratificó que detrás de estos controvertidos decretos está la intención de García de realizar grandes “meganegociados” en tres importantes infraestructuras del estado peruano: el gas de Camisea, el puerto norteño de Bayóvar y el puerto del Callao.
En el caso del primero, dijo que el objetivo es utilizar las reservas de gas de Camisea para abastecer de energía al norte de Chile.
Indicó que la segunda parte del plan entreguista consiste en regalar a la transnacional española Repsol el proyecto de PetroPerú de una plataforma de comercialización de Hidrocarburos en el Pacífico Sur, en el puerto norteño de Bayóvar. “Con el dispositivo en cuestión se le regala a Repsol, todas las instalaciones, equipos y activos de PetroPerú”, alertó.
La tercera joya de la corona que desea entregar García al capital transnacional, con vínculos indirectos Chilenos, es el muelle norte del Callao, la principal infraestructura del primer terminal portuario del país.
“Quieren entregar el puerto del Callao a un monopolio u oligopolio, con el consiguiente pago de un sobrecosto de mil millones de dólares anuales, a cargo del contribuyente nacional. ¿Y de quién sería el monopolio?: Del grupo naviero Chileno Neptunia, perteneciente a la familia Von Appen, que ya tiene el control del transporte de combustible de la producción de PetroPerú”, especificó.
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