Avance. Empresas están dispuestas a ceder recursos, afirman. Mientras las utilidades netas empresariales fueron S/. 108,849.0 mills, el óbolo fue solo de S/. 2,274.9 millones. El próximo gobierno negociará la creación de un impuesto a las ganancias extraordinarias en minería, adelantó ayer el futuro ministro de Energía y Minas Carlos Herrera Descalzi.
“Hemos podido conversar con muchas de las empresas mineras y todas ellas han entendido y están dispuestas a ceder al esfuerzo de dar más recursos”, afirmó Herrera en entrevista a la agencia Reuter.
Herrera aseguró, no obstante, que el nuevo impuesto buscará no afectar la competitividad de las mineras en Perú, considerando que es un importante exportador mundial de metales.
Dijo que este asunto ha sido consensual, ya que ayudaría a cubrir las necesidades de la población y con ello reducir los más de 200 conflictos sociales que afronta el país.
Política del hortelano
En efecto, horas más tarde, según afirmó la Comisión de Transferencia de Gana Perú, nuestro país no ha recibido durante el último quinquenio la renta minera que le corresponde por la explotación de sus recursos naturales.
“Al contrario, se ha aplicado una política del perro del hortelano que ha causado a la fecha 118 conflictos medioambientales”, precisó la coordinadora de esa comisión, Marisol Espinoza.
La congresista destacó que mientras las utilidades netas empresariales , entre el 2007 y el 2011, son de S/.108,849.0 millones, el óbolo minero (negociado por el gobierno saliente) apenas es de S/. 2,274.0 millones.
Y para que no quede duda de la millonaria rentabilidad minera, Espinoza dijo que solo 5 empresas obtuvieron utilidades netas de más de 60 mil millones de soles entre el 2006 y el 2010.
“Todo indica que el precio de los minerales seguirá subiendo, y con ello las ganancias, por lo que el Estado peruano también debe beneficiarse de esta situación”, explicó por su parte Manuel Dammert, coordinador de la Comisión de Energía y Minas.
Gas de Camisea
El especialista responsabilizó al gobierno aprista de haber impedido, entre el 2005 y 2006, la masificación del uso del gas natural y a la vez impulsar el consumo del GLP con precios altos y un mercado monopólico.
“Se manipularon precios y 11 años después de la firma del contrato de Camisea ni siquiera se ha logrado las 70 mil conexiones domiciliarias, cifra proyectada para el 2005”, dijo tras destacar que ya deberían haberse instalado medio millón de conexiones en Lima y un millón en todo el país.
Claves
Petróleo. La Comisión de Transferencia advirtió que el contrato del Lote 1AB en la selva y otros en la costa norte vencen este año y retornan al Estado.
Modernización. En esa línea Espinoza alertó que a la fecha no se ha reglamentado la Ley de Modernización de Petroperú, lo que limita la asociación a partir de los lotes que van a retornar al Estado. Con ello se perdió la oportunidad de mejorar la competitividad en el sector.
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