Las “apetencias” en Miami sobre las elecciones en
Venezuela
La pupila insomne
Muchas gracias. (Edmundo
García)
EDMUNDO GARCIA: Vamos ahora a un debate, con el debido respecto, que promete
ser caliente.
ARTURO LOPEZ-LEVY: Muchas gracias Edmundo, a ti y a tu audiencia los mejores
saludos.
EG: Acaba de aparecer un artículo en El Herald firmado por Juan Tamayo
cuyo titular es “Derrota de Chávez podría promover cambios en Cuba”. Ese es el
titular del artículo del señor Tamayo; yo ayer expresé lo que están haciendo los
medios de difusión hispanos en Estados Unidos, sobre todo en esta ciudad,
saturando la atmósfera, creando una matriz de opinión que dé la percepción de
que realmente Capriles será el ganador y que entonces Chávez no reconocería la
victoria de Capriles y eso dejaría las bases preparadas para crear controversias
y desórdenes alrededor del proceso electoral. Y digo que es una matriz de
opinión porque no hay una hora ni un minuto del día (esto comenzó desde febrero)
en que no aparezca en la prensa de Miami (y en estas últimas dos, tres semanas,
ya es una cosa totalmente desbocada) una opinión, un artículo, una información
que no esté condicionada a generar ese tipo de percepción en el lector, en el
televidente o en el oyente. Esto se ha incrementado, de hecho Juan Tamayo, que
siempre trabaja hacia la línea de Cuba, también se ha enfocado hacia el tema de
Venezuela y en esta ocasión, en este artículo de versión electrónica que ya está
en El Nuevo Herald, pues lo que hace es precisamente vincular ambos temas.
Tamayo hace un grupo de afirmaciones, sin embargo a mí lo que me llama la
atención, por lo cual invité a Artuto López-Levy, es el hecho de que
algunas afirmaciones que aparecen en el artículo se atribuyen o se entiende que
las ha dicho Arturo López-Levy, con respecto a lo que sucedería si no ganara el
presidente Chávez. La primera afirmación que en mi opinión se le atribuye dice
textualmente que “la victoria de Chávez el domingo en unas elecciones reñidas
podría impulsar a Cuba hacia la moderación”, y se lo atribuye, usa la palabra
“dijo”, “dijo Arturo López-Levy, ex analista del gobierno cubano que ahora
enseña en la Escuela de Estudios Internacionales Josef Korbel de la Universidad
de Denver”. Esa frase de que impulsaría a Cuba hacia una “moderación”, ¿es suya
profesor López-Levy?
AL-L: Mira, yo le contesté un cuestionario que me envió el periodista Juan
Tamayo, sobre las elecciones en Venezuela y especulamos sobre los
posibles escenarios; yo no recuerdo haberle dicho, incluso tengo delante de mí
algo que le mandé sobre esto de la “moderación”; hay otras frases que él pone
entre comillas y que son efectivamente mías. Yo incluso partí de la idea que lo
más probable era una victoria de Chávez, incluso no me atreví a decir cuán
reñidas iban a ser esas elecciones. Creo que ese elemento que tú has dicho al
inicio es importante, puede ser que esa campaña mediática que hay allí y que
tiene lugar, yo no dudo que eso exista; en mi opinión, y es lo que he visto en
la mayoría de las encuestas, todo indica que el presidente Hugo Chávez
sale como favorito; en la mayoría de las encuestas incluso tiene ventaja de más
de 7 puntos sobre el candidato Henrique Capriles. Eso más o menos fue el
escenario a partir del cual yo hice mi reflexión.
EG: Vamos por partes, entonces, esta afirmación que le atribuye el periodista
Juan Tamayo a usted, donde dice que impulsaría a Cuba hacia una
“moderación”, esa frase literal no es suya.
AL-L: Literalmente no es mía, pero sí puede inferirse de cosas que yo dije,
por ejemplo sobre la diversificación económica, que sería una urgencia mayor en
el entendido de que yo asumo de que la oposición va a tener un mejor record, una
mejor participación, una mejor votación, que en las ocasiones históricas
anteriores en las cuales se ha enfrentado al presidente Chávez. A lo mejor él
piensa eso y yo hablo también…
EG: Vamos por parte, mire profesor López-Levy, yo hablo claro y preciso, para
mí Juan Tamayo es un embustero, es un manipulador y es alguien al servicio de
las peores causas de esta comunidad y de América Latina. Esa es mi opinión, la
he dicho siempre y la repito; yo quiero precisar la suya, porque usted ha sido
parte de este programa, no la de Juan Tamayo. Usted dijo a Juan Tamayo que las
elecciones en Venezuela podían llevar a Cuba hacia una “moderación”, ¿esa frase
es una mentira de Juan Tamayo o es una verdad?; más allá de que se infiera o no
se infiera, textualmente, ¿es verdad o es una mentira de Juan Tamayo?
AL-L: Yo textualmente no le dije eso.
EG: Entonces es mentira de Juan Tamayo.
AL-L: Bueno, yo le digo, habría que ver la interpretación.
EG: Más allá de interpretaciones, literalmente.
AL-L: Muchas veces cuando uno da entrevistas a medios, los periodistas cortan
parte de la frase, toman una paráfrasis, para decir lo que ellos interpretan
como el sentido. Yo incluso no entiendo bien qué quiere decir “impulsar hacia la
moderación”; ¿qué quiere decir eso?, bueno esa es una cuestión que él debería
decir; la interpretación que él tiene.
EG: Pero el problema es que él se la está atribuyendo a usted.
AL-L: Bueno, yo te digo, las partes que él me pone entre comillas a mí es
exactamente lo que yo dije. Esa parte que no está entrecomillada no es
exactamente así como yo se lo dije.
EG: Entre las frases que aparecen entre comillas, dice Juan Tamayo en otra
que “La Habana debería tratar de establecer ‘relaciones más fluidas’ con todas
las fuerzas políticas en el país sudamericano ‘más allá de sus lógicas
preferencias ideológicas’, señaló López-Levy en un correo electrónico a El Nuevo
Herald”; mi pregunta sobre esa frase… Yo le voy a decir cómo yo lo interpreto.
Los amigos de la revolución Cubana quieren que gane Chávez; y los enemigos de la
revolución Cubana quieren que pierda Chávez; los enemigos de la revolución
cubana son los mismos enemigos de la revolución Bolivariana que encabeza el
presidente Chávez y quieren que pierda Chávez, y ven un efecto dominó, un efecto
carambola, en que si Chávez pierde cómo influiría eso en Cuba. Usted qué
disquisición hace al respecto.
AL-L: Bueno, en primer lugar yo nunca he adoptado ese criterio de “efecto
carambola”. Ni se lo dije al periodista Juan Tamayo ni lo he planteado nunca. Al
contrario lo que siempre he dicho es que Cuba sobrevivió la destrucción del
campo socialista con un impacto mayor en la estructura de comercio exterior, en
la relación política y relaciones económicas cubanas, y no sucumbió. Así que a
mi me parece que obviamente una derrota chavista podría tener un impacto
negativo en Cuba pero no, es mi opinión, de que vaya a colapsar el sistema
cubano ni mucho menos.
EG: Usted recuerda cuando en Nicaragua el presidente Daniel
Ortega perdió las elecciones con Violeta Chamorro.
AL-L: Sí, claro.
EG: ¿Usted recuerda que eso haya tenido algún impacto?; o sea, que los
cubanos hayan dicho: bueno, ahora como perdió Ortega tenemos que cambiar nuestra
línea de dirección porque mira lo que le pasó a Ortega; ¿usted recuerda que haya
pasado algo así en Cuba cuando perdió Ortega con Violeta Chamorro?
AL-L: Mira Edmundo, eso no pasó pero también la relación es diferente. La
relación Cuba-Nicaragua es una relación diferente a la relación que hay en
Venezuela en términos de la relación energética, del superávit que tiene Cuba
actualmente en el comercio y los servicios a partir de la presencia en Venezuela
y otros países del ALBA como parte del acuerdo de comercio, de médicos,
trabajadores sociales y otro tipo de trabajadores, así que esa relación es
diferente; a mí me parece que esa analogía no es válida.
EG: A ver si esta le parece válida profesor porque hay otra analogía…
AL-L: Más importante era la de la Unión Soviética, y cuando desapareció la Unión Soviética no pasó nada.
EG: A eso iba, Cuba perdió el 70% de sus exportaciones, ningún país en el
mundo hubiera podido soportar la pérdida del 70% de sus exportaciones. Antes
había perdido, al triunfo de la revolución, y sin tener los acuerdos que
consiguió después con el mundo socialista, al principio de la revolución pierde
un altísimo porciento porque Estados Unidos le impone un grupo de sanciones a
Cuba sin que Cuba todavía tenga acuerdo con otros países, ¿usted recuerda que
haya cambiado o que haya hecho un diferendo en el rumbo de la revolución esos
dos hechos anteriores que ya no tendrían que ver con Nicaragua sino con
relaciones incluso más profundas o digamos de mayor rango comercial que las
actuales con Venezuela?
AL-L: Mira yo creo que no varió ni la esencia del sistema político cubano, ni
el proyecto político originado con la revolución del 59; obviamente la
desaparición del campo socialista tuvo importantes implicaciones en la forma en
que ese proyecto se manifestó a partir del año 92, la reforma constitucional del
año 92 yo creo que tiene que ver con el ajuste a un mundo cambiante, eso es lo
que te puedo decir al respecto. En relación a la frase que tú acabas de citar,
yo en el correo que le pasé a Juan Tamayo, y es un punto de vista que tengo, es
que en la elección actual la oposición venezolana ha tratado de moverse al
centro buscando atraer el llamado “chavismo light” o los sectores que se han
llamado como “ni ni”, se les dice “ni chavistas” “ni opositores” y como parte de
eso había una proyección de política exterior en la cual el tema Cuba, a
diferencia de la posición dura tradicional, que todo el tiempo se refirió a Cuba
y al ALBA con hostilidad, en este nuevo discurso Capriles fue más moderado y ha
dicho que Venezuela seguiría formando parte tanto de los mecanismos del ALBA
como del mecanismo de integración con Cuba. A mí me parece que eso es un
elemento a tomar en cuenta, esa diferencia que existe entre el antichavismo
duro, hacia dentro, y esa diferencia podría abrir oportunidades y retos para la
diplomacia cubana en un escenario post electoral. Te llamo la atención de que
las elecciones, yo oí tu programa de ayer y yo creo que un tema importante es
que las elecciones no son concurrentes, esta es una elección presidencial
solamente y hay una elección parlamentaria en diciembre.
EG: Posterior, pero los resultados de esta elección van a repercutir en la
próxima elección, a eso es a lo que me refería, yo sé que no son concurrentes;
si lo dije ayer mal me refería a que tenía influencia. Pero déjeme volver, y
déjeme ser sincero con usted y con la audiencia. Porque si yo le hablo con
sinceridad a Posada Carriles, cómo diablos no le voy a hablar con
sinceridad a cualquier otro. Y si yo hablo con sinceridad a… Yo le voy a hablar
con sinceridad: a mí me parece cuando yo oigo este tipo de declaración de usted,
a quien yo considero una persona, no por los títulos académicos que le dan en
Estados Unidos sino porque sí conoce la realidad cubana, porque la vivió, y la
vivió desde dentro, porque estudió, porque conoce sus instituciones; a mí me
parecen algunas declaraciones suyas de un elitismo tal que me resultan propias
de un Tomás Bilbao, que sabe de Cuba lo que sé yo de la isla de Creta, o lo que
sé yo de la poesía de Pericles que es absolutamente nada; o sea, me parece
ingenuo escuchar de alguien que conoce Cuba como la conoce usted; usted conoce
bien Cuba porque usted vivió en Cuba, trabajó en Cuba y se formó en Cuba, y
entiende Cuba y visita a Cuba, a mí me parece, me causa sensación, que usted
crea realmente que Cuba va a aliarse por ejemplo a Capriles que me parece un
gran hipócrita, porque un día dijo que era antiimperialista, el otro día, esta
semana, al otro día que seguiría en el ALBA, y después que el asunto del
petróleo cambiaría entre las mecánicas y dinámicas de Venezuela en su política
exterior, y que Cuba esto y que le explicaría a Raúl Castro… A mí me parece
ingenuo, con todo respeto, que alguien piense que Cuba va a establecer nexos con
una persona así; una persona así que le recuerdo, además ya en lo personal,
formó parte, cuando el golpe de estado contra el presidente Chávez, formó parte
de quienes asaltaron a la embajada cubana. Capriles entró a la sede diplomática
de Cuba violando todas las regulaciones internacionales, y evidentemente
solidarizado con los golpistas, en la época en que George W.
Bush amenazaba al
mundo, que Otto Reich era el Consejero de Seguridad Nacional y que Roger Noriega
estaba también en la misma parte de los que estaban por el derrocamiento de
Chávez. A mí me parece iluso; y no me extraña que lo diga alguien como Tomás
Bilbao, del Cuba Study Group, pero que lo diga usted sí si me extraña.
AL-L: Bueno, mira Edmundo para empezar yo nunca he hablado de una alianza,
fíjate que lo que dije e incluso lo cita el periodista Tamayo, yo hablo de que
salvando lógicamente las propias diferencias ideológicas, cuando hablamos de
alianza hay una alianza que tiene obviamente preferencias de ese corte, entre el
Partido Comunista de Cuba y el liderazgo cubano y el Partido Socialista Unido de
Venezuela y el liderazgo chavista; dicho esto, incluso te digo yo estoy muy
orgulloso de mi formación en Cuba y de haber aprendido allí, y trato de estar
siempre atento a leer incluso la prensa de Cuba, e ir a Cuba y mirar y todo eso,
me parece que eso es importante. Las opiniones sobre Tomás (Bilbao) yo no voy
como siempre a participar en eso. Ahora, siempre he tratado, y no sé si has
notado que eso es también una continuidad en mi trabajo, siempre he tratado de
pensar desde mi propia perspectiva que es una perspectiva nacionalista no
comunista, lo que yo creo son los intereses nacionales de Cuba y la mejor
proyección a esa identidad nacionalista. En ese sentido a mí me parece que hay
que tener claro las alianzas ideológicas que hay y los intereses nacionales que
hay son de fortalecer esa integración entre Cuba y Venezuela, darle un contenido
lo más amplio posible y si hay fuerzas dentro de la oposición que se manifiestan
positivamente en torno a los componentes de esa integración, como la presencia
de médicos y maestros, hay por lo menos que reconocerlo y hacer lo posible por
explorar esas vías, independientemente de las preferencias ideológicas y de las
alianzas que existen. Yo estoy de acuerdo que tú tienes otra visión y otra
proyección, por eso yo no me considero ni ingenuo, ni la persona que diga esto
que yo estoy diciendo es una persona de esas características; la razón está en
las matrices ideológicas que en mi caso son nacionalistas, que guían mi
análisis, y yo creo que ese enfoque normativo por el que uno empieza es
importante a tener lo en cuenta.
EG: Esta frase, entrecomillada también, que se la atribuye Juan Tamayo a
usted, dice que el hecho de estas elecciones en Venezuela traería elecciones más
competitivas en Cuba, ¿qué quiere decir usted con eso?
AL-L: No, yo digo que nada puede traer a Cuba elecciones más competitivas que
no sean las acciones del pueblo cubano, ahora no tengo la cita delante de
mí.
EG: Yo la tengo, se la leo: “Y las competitivas elecciones venezolanas
podrían incluso ayudar a promover con el tiempo ‘elecciones más competitivas en
Cuba’, agregó López-Levy.”
ALL: Lo que yo dijo, y lo tengo ahora aquí, es que “crea apetencias de
comicios más competitivos en Cuba, con posturas, propuestas y candidatos que
expongan formas diferentes de gestión”, eso es lo que recuerdo haber dicho sobre
este tema, y esto es parte de lo que también he dicho, yo creo que en Cuba
estamos en presencia de una transición inter generacional, tanto a nivel de la
sociedad como del liderazgo cubano. Hay modelos de izquierda en América Latina
donde hay un nivel mayor de competitividad política que en el caso de las
elecciones del Poder Popular cubano e incluso yo me refiero a que el colorido y
diferencias que se ven en la Asamblea Nacional venezolana, y por ejemplo el
intento del Presidente Chávez, que lo ha dicho, que él quiere llegar a sectores
de clase media, incluso a los sectores más ricos con una plataforma multi
clasista, es diferente del tipo de proyección que tenemos en Cuba, incluso se lo
dije así a Juan Tamayo, que en ausencia de una política de acoso como el
embargo, modelos de este tipo se convierten en modelos más atractivos, puesto
que también desde la perspectiva mía la justificación fundamental del modelo
unipartidista cubano está en la existencia del acoso y hostilidad externa
asociada a la política exterior de los Estados Unidos.
EG: Pero en nada de eso lo cita Tamayo a usted.
AL-L: Bueno, yo te digo que yo se lo dije a Tamayo. Y esto como mismo yo
confío en tu sinceridad yo me imagino que tú confías en la mía. Yo le dije, te
lo puedo citar a ti…
EG: ¿Usted se da cuenta lo que hacen los medios? Mire, los medios tienen una
forma de trabajar y esto es muy simple de explicar. Mire, en un artículo como
este, para poner un ejemplo, en un artículo como este usted agarra a Otto
Reich y para poner un ejemplo contrario agarra a Michael Moore, ya
usted tiene armado el artículo si quiere exponer dos opiniones bien
contrapuestas. Otto Reich y Michael Moore sobre el mismo tema. ¿Qué hacen ellos
(los medios) para hacer el rollito de primavera de la mentira?, buscan lo que
ellos puedan manejar como comodines, que no le altere el sabor al plato, buscan
los comodines, ¿usted se da cuenta que Juan Tamayo ha cogido su declaración que
fue más amplia, más explícita, para usarla como comodín en su artículo? Y cuando
digo Juan Tamayo digo esa prensa stablishment que lo que hace es usar a la gente
como comodines, ¿para qué?, para que no se altere el sabor del plato.
AL-L: Mira, lo que yo digo es lo siguiente y te lo voy a citar textualmente:
“En Cuba se afianza el criterio que en ausencia de una política de acoso como el
embargo, un reconocimiento de la pluralidad, al menos al estilo de Venezuela,
sería un lógico desarrollo”; eso es exactamente lo que yo dije complementando
eso de que creaba apetencias de comicios más competitivos, yo creo que en
Venezuela los comicios son más competitivos que en Cuba y por eso es que
establezco esa comparación. Pero me parece que lo que tú dices es digno de la
mayor atención. En lo personal yo soy profesor universitario, cuando me llaman a
hacerme una entrevista, trato de darla; cuando me sienta manipulado, tomaré
distancia de aquel que lo hace. Yo me hago responsable de lo que yo digo, no del
enfoque general del artículo (de Juan Tamayo en El Nuevo Herald). Incluso
te digo, mi premisa es que se va a producir una victoria chavista, en la cual la
oposición va a cerrar brecha; ni siquiera estoy hablando de una elección que se
defina por 2 o 3 puntos, ni mucho menos, pero sí creo que el movimiento, que el
pívot hacia el centro del candidato Capriles, tú lo ubicas a nivel retórico, yo
creo que es más conveniente que el tipo de política que aplicó la oposición de
cuestionar la presencia cubana todo el tiempo en Venezuela.
EG: Lo que a mí me parece que todo eso es muy hipócrita, esa es mi opinión;
déjeme hacerle una última pregunta, este título de “Derrota de Chávez podría
promover cambios en Cuba” por supuesto que ese es un título de Tamayo o el
editor jefe. Déjeme hacerle una pregunta y es una pregunta que se la haría a
cualquiera. Suponiendo que usted, profesor, fuera venezolano, para que no me
diga “yo no soy venezolano”; suponiendo que usted fuera venezolano, ¿usted
votaría por Capriles o por Chávez?
AL-L: Bueno Edmundo, yo la verdad que te digo, que yo tendría que respetar lo
que… yo no soy venezolano… Mira, hay una pregunta hipotética que una vez le
hicieron a Henry Kissinger, y le preguntaron qué hubiera sucedido si Lee Harvey
Oswald hubiera matado a Krushov en lugar de a Kennedy; lo que
Kissinger contestó fue que lo único seguro es que el millonario Onassis
nunca se hubiera casado con la esposa de Kruschov.
EG: Usted no me quiere contestar la pregunta; usted no me la quiere
contestar.
AL-L: Yo como parte de una proyección nacionalista tendría que estar en
Venezuela y aquel que se ponga de parte de la nación, que pueda estudiar con
cuidado su plataforma y saber…
EG: Se nos acaba el tiempo Arturo, solo me queda tiempo para que me responda:
O por Capriles, o por Chávez o declinas contestar la pregunta. Solo tres
opciones.
AL-L: Bueno, yo declino contestar la pregunta.
EG: Bien gracias Arturo por compartir este fragmento de “La tarde se mueve”.
Quiero decir mi opinión finalmente: aún suponiendo que perdiera Chávez, que no
va a perder, Chávez va a ganar las elecciones, lo único que podría pasar en caso
de que continuara algún tipo de relación entre Cuba y Venezuela va a ser un
cambio de embajadores entre Caracas y La Habana, nada más; no va a determinar
ningún cambio, la historia de Cuba demuestra que Cuba ha sido una nación que ha
resistido en pos de su soberanía con muchas limitaciones, muchas más escaseces
que las que pudieran haber en el caso de una derrota de Chávez, que no va a
suceder, prepárense, que no va a suceder. Gracias al profesor López-Levy y a
ustedes.
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