martes, 1 de marzo de 2011

“Debemos evitar otro baguazo en la selva”

El presidente regional de Madre de Dios, José Luis Aguirre Pastor, responsabilizó al gobierno de los actos de violencia suscitados ayer en Puerto Maldonado, debido al ingreso de las Fuerzas Armadas en la erradicación de la minería informal que es la principal fuente de trabajo en el departamento.

-¿Qué medidas debe tomar con urgencia el gobierno para solucionar los problemas de violencia suscitados en Madre de Dios?-Tenemos dos propuestas inmediatas. Por una parte el retiro de las Fuerzas Armadas y la suspensión de las operaciones de erradicación de las dragas (embarcaciones con maquinaria para la extracción de mineral de oro del lecho de los ríos) de los mineros informales, operación que ha sido ordenada mediante el Decreto de Urgencia 007-2011. En segundo lugar, estamos solicitando una coordinación directa con el gobierno para lograr la paz social en nuestra región.

-¿Qué propuestas tienen para solucionar el problema de los mineros informales?-Estamos planteando que el gobierno central, el gobierno regional de Madre de Dios y los mineros informales elaboren en forma conjunta un plan de formalización de la minería informal y la reconversión de esta actividad en otras labores productivas como la agricultura, la reforestación y el ecoturismo. También existe el problema de los “mineros sin tierra”, quienes trabajan en las pequeñas minas de otros. Son 5,000 que también necesitan ser formalizados.

-El Ministerio del Ambiente sostiene que los mineros informales causan la contaminación en los ríos. ¿Cómo se puede formalizar una actividad de ese tipo?-Tenemos una iniciativa de cambio del uso del mercurio por una maquinaria de recuperación de oro limpio por parte de los mineros informales. Pero para llegar a esto, tenemos que realizar el plan de formalización en base a estudios ambientales y registros tributarios. Sin embargo, parece que al gobierno no le interesan estos proyectos de formalización y desarrollo en Madre de Dios.

-¿Qué le hace falta al gobierno regional de Madre de Dios para realizar este plan de formalización?-Todo. Para empezar no contamos con una sede propia, porque fue destruida por un incendio el 2008 en medio de un conflicto social y ahora estamos atendiendo en un embarcadero turístico y en varios locales alquilados. Tampoco tenemos presupuesto para el fortalecimiento de la Dirección Regional de energía y Minas que sería la encargada de resolver este problema.

-¿Qué tan importante es la actividad minera en Madre de Dios?-La actividad minera en la región genera una ocupación directa de 20 mil mineros informales y da trabajo de manera indirecta a otras 35 mil personas que se dedican al transporte terrestre y fluvial, el comercio, las bodegas, los mercados, el servicio de la pequeña industria metalmecánica, etc. Asimismo, la pequeña minería y la minería artesanal dieron origen a nuestros principales centros poblados como Caychihue y Quebradas, Huepetue, Delta 1, Mazuco, Laberinto, Fortuna y San Juan Grande, entre otros. El problema minero es un problema social y por eso como gobierno regional le pedimos al gobierno central que coadyuve al fortalecimiento de nuestra Dirección Regional de energía y Minería que prácticamente no existe.

-¿Si el gobierno no hace caso de sus demandas qué va a pasar?-Simplemente va a estallar otro “Baguazo”. Nosotros queremos construir y no destruir. Para ello es necesario que nuestra gestión regional vaya de la mano con el gobierno central y con la Superintendencia Nacional de Administración Tributaria (Sunat) con el fin de lograr el desarrollo económico de Madre de Dios. La población está en constante tensión, debido a tantos años de postergación. El Estado debe aprovechar la coyuntura para hacerse presente y fomentar la inversión en otros sectores laborales. Si las autoridades no se hacen presentes, al final nosotros, como gobierno regional vamos a chuparnos el problema.

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