Alan García amenaza a sus adversarios ¿a alguien le sorprende?

A escasos cinco días de abandonar Palacio de Gobierno, el presidente Alan García Pérez demostró su forma maquiavélica de hacer política y aunque negó que quiera volver a repetir el plato el 2016, dejó una advertencia disfrazada de consejo al próximo gobierno.

“Mi consejo a mis adversarios es no se metan conmigo y yo no me meteré con ustedes, porque si se meten conmigo tendré que volver a la política con todas las fuerzas que pueda”, advirtió ayer el Mandatario durante la presentación de cartas credenciales de los nuevos embajadores de Brasil y Venezuela en el Perú.

Negó que tenga algún “interés” en volver a ocupar el sillón presidencial y sostuvo que aunque tuviera la intención de regresar, nunca lo diría porque se expondría a los ataques de sus adversarios.

“No tengo ningún interés en hacer eso (volver a postular) y además, imagínense cómo se obsesionarían todas las personas y cómo me destruirían desde este momento. Ahora intentarán hacerlo, pero ya vi esa película y lo único que hace eso es acelerar que uno vuelva al poder”, refirió, dejando claro cómo ha sobrevivido a una larga y accidentada carrera política.

Algunos “tontos” quieren ser presidentes el 2016 Sin abandonar su elevada autoestima, García Pérez argumentó que no se arriesgaría a perder el “buen recuerdo” de un gobierno exitoso volviendo  a tentar la presidencia, y sostuvo que esas especulaciones proceden “del temor de algunas personas y a veces de algunos tontos que quisieran ser presidentes el 2016 y dicen ‘cómo lo liquidamos a este”.

“Por qué razón jugaría ese buen recuerdo para hacer un tercer gobierno que no se cómo saldrá, eso es jugar una aventura”, comentó tras reconocer que su primer gobierno no fue bueno porque se desarrolló en una “época mala” y tenía “poca experiencia”.

En ese sentido, sostuvo que preferiría que nuevas generaciones asuman el gobierno a partir del 2016 y se quejó que sus adversarios se obstinen en decir que tiene “una obsesión por la figuración y el poder”.

TEORÍA MAQUIAVÉLICA

Como si se tratara de una de sus clases magistrales de teoría política, García Pérez explicó la forma como se ha desenvuelto en sus dos gobiernos, con ‘una vieja historia’, en la que un Presidente entrante le echa la culpa de todos sus errores al gobierno anterior.

Así, minimizó las críticas a su gestión realizadas por la Comisión de Transferencia del gobierno del presidente electo Ollanta Humala. “Hay que maltratar un poco al que se va y así uno le baja los humos y le baja el nivel”, explicó.

Sin recordar la forma cómo criticó al gobierno del ex presidente Alejandro Toledo tras asumir la presidencia en el año 2011, aseguró que alabó el manejo económico prudente de la gestión de su antecesor.

“Hay que continuar las cosas positivas y terminar todas las obras que uno encuentra a medias, eso es lo positivo, pero en fin, algún día la humanidad evolucionará hasta el momento en que todos reconozcamos que hay algo bueno en el que se va. Ya vi esta película una vez”, refirió con amnésica sabiduría.

OBRAS INCONCLUSAS

En relación a las críticas a su gestión, el Jefe de Estado sostuvo que es “natural”, aunque no “positivo”, que haya críticas a su gobierno porque está dejando la “valla muy alta”, y no perdió la oportunidad de enumerar las obras, inversiones y los altos índices de generación de empleo, inversiones y reducción de la pobreza, que está dejando su gobierno “duela a quien le duela”.

También se refirió a las críticas de diversos sectores por la inauguración de obras colosales e inconclusas y las atribuyó a la natural competencia con el gobierno anterior. “Añado a eso las famosas obras inconclusas, que dicen ustedes los periodistas, pero están allí los hospitales, las carreteras, está allí todo”.

Al presidente García le faltó mencionar que a los numerosos hospitales sin concluir inaugurados en las últimas semanas, además del Tren Eléctrico, la sede del Ministerio de Educación y al Hospital del Niño, se sumarán el Teatro y el Estadio Nacional que inaugurará, pese a que las obras evidencian inocultables pruebas de que aún no están terminadas.

No le gustan las despedidas

En relación a la suspensión de la Cumbre de países de la Comunidad Andina que se había previsto realizar hoy en Lima, el jefe de Estado evitó opinar sobre el tema y sostuvo que respetarán la decisión del próximo gobierno de haber pedido su postergación.

En ese sentido se mostró de acuerdo en no tener más reuniones con sus pares de los países vecinos. “Ya tenemos muchísimas fotos de familia en cinco años como para hacer la última, además las despedidas no me gustan mucho tampoco”, anotó con evidente nostalgia por los años que dirigió los destinos del Perú y que culminarán el próximo 28 de julio.